Reúne una selección podada de lo escrito en español durante mis primeros años universitarios. Cuando hice la decisión de escribir en español fue una ruptura. Fue una conversación con un poeta que me retó a hacer el cambio. Cuando le dije que era echar por la borda cinco años de trabajo, el tipo me ripostó que a veces hay que regresar a los pañales, tener los cojones de hacerlo. Llegué a la UPR escribiendo en inglés, el idioma donde me inicié y reconocí poeta. Hay un poco de intento de trasladar mi desarrollo en mi poesía en inglés, a nivel técnico, a los poemas en español pero no con muchos resultados felices. Hay poemas, como “qué dulce fue recibir palabras” que publiqué en Alicia la Roja, y otros que me publicó Arcadio Díaz Quiñonez en el suplemento literario de la revista Avance. Estos poemas están en el poemario Cabos Sueltos/Loose Ends que publica la ICPR bajo Lilliana Ramos Collado. Había una selección anterior que había reunido bajo el título Lo Reciencagado. De este libro queda poco o nada. Lo que ven aquí sobrevivió el corte. Esto ahora es otra poda. Lo que sí se refleja son los temas y estilos que van surgiendo en esos años que seguirán surgiendo a través de mis poemas hasta el presente, en todas sus transmutaciones y variaciones. Uno siempre escribe el mismo poema o los mismo poemas, dicen. Eso se evidencia aquí.
jorge morales-santo domingo, poesía puertoriqueña, 1970-2000, Alicia la Roja, Puerto Nuevo, San Juan, Puerto Rico, Puerto Rican poet, generación del setenta.